No eres responsable de la cara que tienes;
eres responsable de la cara que pones.

Qué verdad. Cuántas veces nos hemos sentido incómodos por personas que, al dirigirnos a ellas, aun amablemente, nos han puesto muy mala cara y nos quedamos fatal. Hoy os voy a hablar de una serie creada por Christopher Lloyd y Steven Levitan, que este año ha ganado tres premios Emmy, Modern Family, la historia de una gran familia con su padre y sus hijos, pero diferente. El padre es un señor de mediana edad que, una vez divorciado, se casa con una bella colombiana, madre de un niño, Manny. Este hombre es a su vez padre de dos de los protagonistas más importantes, su hija ama de casa y casada con un simpático gestor inmobiliario; y su hijo gay, con cuya pareja e hija vietnamita forman una estupenda familia. Os daréis cuenta de que tiene un tono peculiar, pero genial. Hay cantidad de historias que todos tienen, pero la mejor historia es que se tienen todos. Nunca les falta el apoyo y el cariño de su familia. Es una historia moderna, pero en la que no existe ningún tipo de violencia ni histrionismo.

Modern Family. Producida por Levitan / Lloyd y 20th Century Fox Television. Distribuida en España por Fox. Todos los derechos reservados.

La vida es un constante desafío, para ellos y para todos. Pone a prueba nuestra capacidad de adaptación. Estas situaciones miden nuestros mecanismos para salir airosos. Esa sensación de tensión, de cansancio, la dificultad para concentrarse y ese agobio, es el estrés que nos acecha. Se habla mucho del estrés, parece que no se puede hacer nada para remediarlo; la mejor forma de hacerlo es intentar no entrar en él y, si ya se está, habrá que buscar las mejores estrategias para poder salir de él.

Por eso os recomiendo esta serie, es la ficción de la que siempre hablamos, la cual, al ser experiencia vicaria, puede hacernos entender que todo el mundo tiene que ir acomodándose a las nuevas situaciones que van apareciendo en la vida. Todo ser va evolucionando, eso no es fácil, pero hasta el final todo es evolución. En ellos veremos los hijos que van creciendo, los nietos; cómo los niños tienen que enfrentarse también a sus nuevas experiencias; o las personas gays con todo lo que (por ser nuevo) parece extraño. Es bonita y muy entretenida. A veces llamamos cosas “de nuestro tiempo”, a situaciones que siempre han estado ahí, incluso Sócrates ya comentaba en el siglo IV a.C: “los niños de hoy en día son unos tiranos. Contradicen a sus padres, engullen la comida y tiranizan a sus maestros”. ¿Os suena?

Espero de todo corazón que paséis unas Felices Navidades y, si se puede, sin estrés. Que os divirtáis mucho.

Con cariño, desde la Mecedora