Dicen que las apariencias engañan y es cierto, aunque a la vista esté que la belleza no sólo está en el interior. De aspecto frágil, resuelto, aniñado, los ojos de Michelle Jenner están llenos de vida, de un espacio privado que oculta pero que no siempre esconde, y que sólo observando con detención se atisba a comprender. Sus agudos stiletto fucsia contrastan con su aire infantil, su interés lúdico, sus ganas de reír; y aunque parezca condescendiente, dúctil entre un equipo enteramente masculino, la suya no es más que aprendida destreza, una camaleónica capacidad para encajar en cualquier ambiente, con cualquier persona, ante cualquier circunstancia.

Parece callada, como si su silencio demostrase que no tiene nada que decir, pero en persona resulta comunicativa y cálida, curiosa aunque algo vacilante. Viéndola nadie imaginaría que esta joven ha pasado a formar parte de nuestro espectro audiovisual sin apenas darnos cuenta, pero con una intensidad que no entiende de rol ni de formato: su sonrisa publicitaria, su interpretación televisiva y teatral y sobre todo su doblaje, nos llevan a reconocerla entre la multitud, quién si no ella ha puesto en Harry Potter la voz a Hermione, la inseparable maga muggle de la saga más portentosa de magia juvenil. Pero Jenner es así, con una inocencia rayana en el candor, con gran celo de su vida privada e hiperactividad profesional a pesar de su ritmo lento, de su caminar pausado y de su hablar con reflexión. Espero en el hall de la sala de cine donde voy a entrevistarla. Entre los pretiles de la balaustrada del recinto, avisto cómo le realizan fotografías mientras pongo a punto la grabadora. Tiene paciencia, le gusta la cámara, no le importa tomarse su tiempo ni tampoco esperar. Raúl Cimas, coprotagonista de Extraterrestre e integrante del grupo Muchachada Nui está a mi vera, ambos esperamos: “a tu lado parezco Chewbacca”, me dice con respecto a nuestra diferencia de altura y comienzo a reír: “soy yo la que a tu lado parezco muy pequeña”, le respondo. Realmente es inmenso Cimas, en todos los sentidos. Unos pasos alejado está Carlos Areces, divertido mientras mira a su compañera de reparto posar ante las cámaras; su camiseta no puede ser más rijosa: “mal de muchos, Consuelo Berlanga”, le miro y me río; su seria informalidad rompe cualquier esquema. La sesión de fotos por fin concluye, y finalmente consigo alcanzar a Jenner. Conociendo a Cimas y a Areces comprendo que Jenner señale que sostener la mirada a sus compañeros fue el reto más difícil de toda la película: “sólo intentaba mirarles y no reírme, ¡pero cómo hacerlo con Carlos Areces hablándome con esa expresión!”. Las dos sonreímos, es imposible imaginarse un rodaje con semejantes portentos de la comedia desenfadada. Y es que ya se sabe, incluso Hermione, a pesar del dominio de infinitos encantamientos, sucumbe ante el inquebrantable hechizo del humor.

Lucía Tello Díaz.- Llevas dedicándote a los medios toda la vida, ¿cómo descubriste tu vocación artística?

Michelle Jenner.- Uy, ¿cómo la descubrí? ¡Es que ya me vi!  Empecé en esto desde muy pequeña, con dos años ya hacía anuncios de televisión y cástings, así que ya me vi; ya estaba dedicándome a ello y siempre me gustó. Mi madre me decía: “si algún día no te apetece seguir déjalo, tú haz lo que te apetezca en la vida”, sin embargo yo siempre le decía que me encantaba, porque así era, me ponía delante de una cámara y era feliz. Siempre me he visto haciendo esto.

LTD.- Aunque llevas desde pequeña dedicándote a este mundo, de la noche a la mañana Michelle Jenner se convierte en una de las primeras figuras femeninas del cine español, ¿cómo se lleva un cambio semejante?

MJ.- Es raro porque tú sigues siendo la misma persona pero son los demás los que te miran diferente. De repente pasas de ir por la calle y no llamar la atención, a ir por la cale y que te señalen, que te pidan una foto. Es raro. Es bonito porque, por lo general, a la gente le hace ilusión verte, o decirte: “he visto esta película y me ha gustado”, o “tu trabajo me gusta”. Eso siempre es bonito.

LTD.- Además eres una actriz a la que le gusta diversificar. Te hemos visto en teatro como Tenorio en Alcalá de Henares; en series, en cine, en anuncios, en doblaje… Poca gente sabe que eres Hermione

MJ.- Sí –ríe con orgullo-.

LTD.- Dedicarse a tantos ámbitos debe ser extenuante. De todas las variantes que ofrece tu profesión, ¿con cuál de ellas te sientes más cómoda?

MJ.- Pues es que lo que más me gusta es precisamente eso, hacer de todo; lo que más me entusiasma es cambiar de un personaje a otro, de un medio a otro; hacer tele, hacer cine; hacer drama, hacer comedia. Hacer cosas que no tienen nada que ver. Creo que eso es lo bonito de ser actor, el poder jugar, jugar a disfrazarte de un personaje y que el siguiente sea totalmente diferente; y saltar de un medio a otro. No sé, es muy satisfactorio.

LTD.- Respecto a  tus referentes en la actuación, ¿a qué intérpretes admiras más?

MJ.- Pues siempre me han gustado mucho Natalie Portman, Meryl Streep… Cómo no, ¡cómo no, qué bestia es! –ríe-, Penélope también. No sé, muchas actrices. Adriana Ozores.

LTD.- Adriana Ozores es magnífica

MJ.- Es muy grande –ríe cómplice-, muchísimo.

LTD.- En toda esta vorágine de trabajos, ¿cómo llegó el proyecto de Extraterrestre?

MJ.- Pues todo fue muy rápido. El resto del equipo artístico estaba ya elegido, y me llamaron diciéndome que querían verme para la siguiente película de Nacho Vigalondo. Me dijeron que era de ciencia ficción y yo dije: ¿cómo? ¿De ciencia qué? –ríe con simpatía-. Así que hice el cásting, conocí a Nacho, a Julián y a Raúl, y ya nos reímos mucho haciendo la prueba. Enseguida me dijeron que sí, que les había gustado y que me habían elegido. Así que para adelante. Fue todo muy rápido.

LTD.- ¿Y cómo ha sido rodar con semejantes figuras del humor?

MJ.- ¡Muy difícil! –ríe con alivio-, muy divertido pero muy difícil; había veces que lo pasaba realmente mal porque no podía con la risa, era incapaz de mirar a Areces a la cara, ¡no podía! Me decía a mí misma “tenemos que hacer esta secuencia” pero era muy complicado. En realidad fue muy divertido porque además fue un rodaje muy intenso. Fueron tres semanas en un piso de Lavapiés todo el equipo, y realmente si no hay buen rollo, tantas horas, tantos días, tanta gente en un mismo sitio, hubiera podido ser un infierno. Pero fue genial, nos llevábamos todos muy bien, fue muy tranquilo, muy bueno, muy relajado y, desde luego, es muy de agradecer trabajar así.

LTD.- Y en concreto, ¿cómo ha sido trabajar con alguien como Nacho Vigalondo?

MJ.- Nacho tiene una mente… Le veo como un genio con ese punto de locura que ellos tienen, que a veces no entiendes dónde está su cabeza, pero te das cuenta de que todo lo que hace funciona, y todo es original. Lo que más me gusta de él es que con las películas que hace no puedes decir “ya la he visto”, o “esta trama la he visto en muchas ocasiones”. Todo lo que hace Nacho es siempre muy innovador, muy diferente, y eso hoy en día es muy difícil. Llega un momento en que es casi imposible hacer una película que no se haya hecho ya.

LTD.- Totalmente cierto

MJ.- Es que aunque cambies los nombres de los personajes, la ciudad y algún detalle más, hay muchas tramas en las que ya conoces el planteamiento, el nudo y el desenlace. Por eso hacer una película así está tan bien.

LTD.- Hablando desde la perspectiva del director, creo que tú también quieres ponerte detrás de la cámara para rodar un cortometraje, ¿cómo llevas el proyecto?

MJ.- Sí, ¿cómo sabes eso? –vuelve a reír-. La verdad es que me gusta mucho hacer mis cosas detrás de la cámara, grabar, fotografiar o montar vídeos, me gusta mucho. Tengo ahí un proyecto con una amiga, ella ha escrito el guión y queremos llevarlo para adelante, estamos ahí en la preproducción.

LTD.- Pues ánimo, es muy complicado

MJ.- Sí –ríe-.

LTD.- Y sobre todo que salga adelante el proyecto, es bueno que aumente el número de directoras en España porque, si bien es cierto que hay muchas y muy buenas actrices, sin embargo en el rol de realizadoras el número es muy escaso.

MJ.- Es más difícil. Me parece fatal. Desde luego es distinto. Es igual que cuando lees un libro. Mi madre siempre me dice: “a mí me gustan más los libros escritos por mujeres”, porque supongo que te sientes más identificada, o tal vez porque nadie entiende a una mujer como otra mujer. Un director vale que pueda escribir una magnífica película, pero siempre va a ser una visión masculina. Por eso creo que es necesario que haya una visión más femenina en el mundo del cine.

LTD.- Efectivamente. De hecho hay estudios al respecto, las mujeres comienzan ahora a demandar obras concebidas desde la perspectiva femenina, no sólo aceptando la visión masculina del arte. Así que tu madre tiene razón.

MJ.- Sí, pues es cierto –ambas reímos-. ¡Claro que sí!

LTD.- Además de dirigir, ¿cuáles son los proyectos futuros de Michelle Jenner?

MJ.- Pues ahora mismo hice la primera temporada de Isabel la Católica, como todo está en el aire, no sé si vamos a seguir o no. Así que aquí me tienes, esperando…