Tras un pequeño descanso post nupcial, volvemos a sentarnos en nuestra Pequeña Butaca, y como el tiempo lo requiere, nada mejor que irnos a un lugar soleado, con una playa de aguas cristalinas y puras donde el tiempo tenga intención de detenerse, un lugar de cuento, de ensueño, donde hasta los extraterrestres les gustaría pasar unas vacaciones…. ¡Hawai! El lugar perfecto para que un pequeño y algo desatado extraterrestre aterrice para enseñarnos algo que sólo la factoría Disney sabe hacer, una ración de valores que van más allá. Estamos hablando de la película animada Lilo y Stitch que en 2002 vio la luz producida por Walt Disney Feature Animation y realizada por Walt Disney Distribution, todo del imperio Disney. Aunque fue nominada a los Oscars en 2003 a mejor película animada, no consiguió la ansiada estatuilla dorada.
Todos los derechos reservados a Walt Disney Pictures
Comencemos a desgranar esta historia chispeante y bañada no sólo por el Pacífico sino también por la dulce voz del rey del rock: Elvis Presley. Nuestro loco amigo del espacio es fruto de un desafortunado experimento científico: Stitch, es un error genético alienígena muy agresivo que viene a caer en un paraíso llamado Hawai. Por otro lado, Lilo y su hermana mayor Nany viven como pueden, mejor dicho sobreviven bajo la constante vigilancia de asuntos sociales que pretende separar a las dos hermanas. Lilo adoptará a Stitch como mascota pese a la postura contraria de su hermana que ve en él un nuevo obstáculo en su carrera por permanecer unidas. Las sospechas de Nany no irán muy desencaminadas, Stitch da rienda suelta a su instinto destructor y ante la visita de Cobra Bubbles, de asuntos sociales, la impresión es más que negativa. Ante esta situación crítica, tomará medidas urgentes. Nany irá capeando la situación como puede -como hacemos nosotros en estos momentos críticos que nos ha tocado vivir-. Entretanto Stitch se da cuenta que sus ansias destructivas no sirven de nada en la isla y comienza a sentir la necesidad de formar parte de algo, de sentirse querido, de tener una FAMILIA. Lilo le infunde el concepto «ahona» de familia y el amor incondicional hacia el rey del Rock.
Una vez que Stitch se ha medio insertado en la sociedad, aparece otro problema: ¡le buscan desde su planeta para destruirlo! Está es una de las partes de la película que más me gustan así que no la descuartizaré. Al final como siempre triunfa el amor y la familia, -aunque no en sentido mafioso para eso ya está El Padrino….-. Nuestro amigo destructor permanecerá al cargo de las hermanas, siendo uno más de la familia.
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