Sabéis que hemos editado un libro con todas las entrevistas, críticas, comentarios y contenidos de la revista. Estamos muy contentos y satisfechos por ello, y queremos compartirlo con todos vosotros, creo que lo pasaréis muy bien. Y como empezamos el mes de abril, quisiera haceros partícipes de dos historias que creo, merecen mucho la pena de ser contadas. Me refiero a la serie Fortunata y Jacinta, dirigida por Mario Camus, basada en la novela de Benito Pérez Galdós e interpretada por Ana Belén, Maribel Martín y Eric Gendron; y también a la película Juno, interpretada por Ellen Page, Jennifer Garner y Jason Bateman.
A primera vista, nada parece comparable entre ellas, ni la época (la diferencia es de dos siglos), ni los personajes, pero sus historias tienen más en común de lo que se puede imaginar. Fortunata y Jacinta, maravillosa obra, nos relata la época de mediados del siglo XIX, con dos mujeres perfectamente llevadas por Pérez Galdós, quien acuñó unos nombres muy simbólicos para sus personajes. Fortunata (Ana Belén), es una mujer con la gran fortuna de poder concebir los hijos del hombre a quien ama, perdiendo al primero siendo muy niño, y después de muchas vicisitudes, volviendo a concebir otro para su desgracia.
Imagen de Ana Belén en Fortunata y Jacinta (1980, Mario Camus), producida por TVE. Todos los derechos reservados.
Jacinta (Maribel Martín), como su propio nombre indica, es pura, una mujer bellísima con el infortunio de no poder ser madre, aunque en su corazón es una madre sin hijos, la cual ocupa todo su tiempo en la Iglesia y en hacer obras de caridad, siempre al servicio de los niños. Juan (Eric Gendron), marido de Jacinta y amante de Fortunata, tiene un nombre que es buen sinónimo del hombre que “manipula”, ya que la historia ha hecho a este personaje de la literatura universal, un referente que Galdós ha utilizado con gran maestría. Tenemos a Don Giovanni, a Juan el seductor, al Burlador de Tirso de Molina, al Tenorio de Zorrilla y al don Juan de Heiberg. Creo que son bastante evidentes las “bondades” de este personaje. Ana Belén, en el papel de la otra, amante hasta la muerte de su seductor, lega a su hijo recién nacido a Jacinta, quien acoge a este niño como suyo.
Por su parte Juno, es su versión light, ya que el tiempo lo minimiza todo, y ahora podemos ver las cosas de otra manera, puesto que los prejuicios vamos poco a poco quitándolos de nuestro repertorio. Esta adolescente con el nombre de la diosa de la fertilidad (Ellen Page), va a tener un bebé. Las circunstancias y su poca edad hacen que entregue a su hijo en adopción a otra mujer (Jennifer Garner), cuyo marido, que tiene algo de don Juan, entra en el juego de la seducción, intentando que esta adolescente caiga en sus redes amatorias.
«Juno» – Copyright © 2007 Fox Searchlight Pictures, Mandate Pictures y Mr. Mudd Productions. Distribuida en España por Hispano Foxfilm. Todos los derechos reservados.
Solas las dos, una niña y a la vez una gran mujer, deja que sea Jennifer Garner quien se quede con su bebé, ya que, al igual que Jacinta, era otra madre sin hijo. Qué regalo tan maravilloso, una vida, vida que empieza y que alguien está deseando coger, arropar y cuidar. Hay tantas madres que no pueden tener hijos, que cuando lo son se convierten en las personas más felices, personas que buscan por todo el mundo a ese hijo al que aman. Pero no debemos olvidar que a parte de “don Juan”, hay hombres fantásticos que buscan también con su pareja, poder formar una familia, como nos recuerda Bertrand Tavernier en La pequeña Lola (2004).
Imagen de «La pequeña Lola» – Copyright © 2004 Little Bear, Les Films Alain Sarde y TF1 Films Production. Distribuida en España por Vértigo Films. Todos los derechos reservados.
Para todos, pues ningún niño debe estar sin sus padres, o sus padres adoptivos (padres del alma), como bien dijo Gabriel Marcel: “amar a un ser es decirle –Tú no morirás”.
Por lo menos en nuestro corazón tú estarás siempre.
Desde la mecedora, feliz abril.
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