Si una idea es buena, da para más de una vez
Nam June Paik

En esta ocasión quiero referirme a la capacidad camaleónica de un hombre que llevó al gran público una cantidad de sonrisas, carcajadas, en una época en la que hacía mucha falta, y gracias a las cuales se olvidaban las miserias y los problemas. Me refiero a nuestro querido Juanito Navarro, hombre polifacético que el diez de enero de 2011 se fue a acompañar a los amigos que nos han ido dejando en los últimos tiempos.

Imagen de «Todos al suelo» (Mariano Ozores) – Copyright © 1982 Bermúdez de Castro. Todos los derechos reservados.

Nos diste un disgusto al oír en las noticias que nos habías abandonado sin previo aviso, a las personas que hemos tenido el privilegio de coincidir contigo –que son varias generaciones-, de verte actuar y recitando tus diálogos maravillosos junto con Antonio Ozores, o los estupendos bailes que realizabas con Lina Morgan, cuando enredando sus piernas hacía reír a todo el mundo.

Gracias, pues nos has hecho algo que es lo más importante en esta vida, y es dejar un trabajo lleno de sonrisas. Hacer reír es uno de los cometidos más importantes del ser humano, no conozco otro ser en la tierra, salvo el hombre y la mujer, que puedan tener ese gran poder de hacer feliz a otro semejante.

Muchas gracias por todo. Desde aquí nuestra mayor ovación y cariño.

Un gran aplauso de todos nosotros, “maestro”.
Desde la Mecedora