Título original: Ironman 2
Dirección: John Favreau
País: USA.
Año: 2010.
Duración: 124 min.
Género: Ciencia-ficción.
Director: Jon Favreau
Reparto: Robert Downey Jr., Gwyneth Paltrow, Don Cheadle, Mickey Rourke, Samuel L. Jackson, Scarlett Johansson
Guión: Justin Theroux
Producción: Victoria Alonso, Kevin Felge
Musica: John Debney
Fotografía: Matthew Libatique
Estreno en España: 30 de Abril del 2010.
Tony Stark (Robert Downey Jr.) parece decidido a seguir siendo el chico más malo de entre todos los superheróes. Pese a haber logrado la paz mundial y haber cumplido el sueño de su padre al construir la Stark Expo, Ironman no deja en esta entrega de estar acosado por estrambóticos villanos. En este caso, el afamado multimillonario deberá de enfrentarse no sólo a una nueva ristra de mecanizados enemigos, si no al peor adversario: su egocentrismo. Tras anunciar que su alter ego era el propio Ironman, Ivan Vanko (Mickey Rourke) jura a su padre, en su lecho de muerte, que se vengará de Stark. Para ello, partirá de un diseño semejante al que diseñó su padre -y que curiosamente Stark también usa- para elaborar un mecanismo tan mortal como excéntrico.
Mientras, Tony Stark decide nombrar directora general de su compañía a Pepper (Gwyneth Paltrow), preocupado por el lento envenenamiento que provoca en él el paladio del que está hecho el instrumento que le mantiene con vida. Para suplir las tareas de las que se encargaba Pepper, Tony decide contratar a Natalie Rushman (Scarlett Johansson), una eficiente secretaria que consigue cautivarle con algo más que llevar su agenda al día. Por si fuera poco, el Gobierno de Estados Unidos reclama a Stark que les ceda el diseño de las armaduras diseñadas por él para Ironman, dado el enorme peligro que podrían suponer en las manos equivocadas. Esta segunda entrega de Ironman nos demuestra una vez más que ante la escasez de ideas es bastante rentable seguir explotando la creatividad de la fábrica Marvel, repitiendo una vez más una acción basada en los típicos clichés de Norteamérica. Tranquilos, que en breve podremos disfrutar de una tercera entrega de mano del formato 3D, además de una nueva saga que nos introduce Ironman, “Los Vengadores”. Es irónico, cuando los que realmente tendríamos que encargarnos de la venganza, en compensación, somos nosotros… no ellos.
Con un reparto ya conocido en esta saga (repiten Tony Stark, Gwyneth Paltrow) se incorporan Scarlett Johansson, Mickey Rourke y Samuel L. Jackson. Como bien comentó la propia actriz, Scarlett tuvo que someterse a cinco meses de entrenamiento para su papel en esta película… Quizás yo sea demasiado escéptico, pero no me digáis que se necesitan cinco meses para ese papel. Por supuesto, quizás se refiera a cinco meses, entrenando un primer día para saber cuántos pasos tenía que dar, y un último día -cinco meses después- para saber cuánta carne iba a enseñar.
Mención aparte merece la colaboración de Mickey Rourke. Pese a que en un principio los guionistas querían enfrentar a nuestro superhéroe de la brillante armadura con su archienemigo, “el Mandarín”, no pudo llevarse a cabo. Y es que el cirujano de Mickey (no Mouse, ¡cuidado!) no podía estirar más la cara para conseguir un aspecto más asiático, pero lo dejó preparado con el resto de extras de villano desconsiderado: tatuajes de quita y pon por todo el cuerpo, como si no hubiera sentido reparo en comprar Phoskitos a nivel industrial e ir mostrándolo; unos injertos de pelo lacio y grasiento, de ese de descubrir una nueva arma mortífera -pero no poder descubrir qué contiene el bote amarillo de la ducha-; un par de estiramientos faciales (de los que te suben el ombligo de tanto estirar) y ya por último, un repaso de Botox a nivel general, no vaya a ser que se le caigan las carnes en el peor momento. (Ya sabéis que si queréis poneros Botox en casa al estilo Rourke, no os olvidéis de poner una capa de imprimación antes, que si no luego no tira bien la toxina milagrosa….).
En cuanto a ti, Gwyneth, mi querídisima Gwyneth… esperaba cambiar de opinión ante esta nueva entrega, pero debo de suscribir todo lo que se escribió en la crítica para esta misma web de Ironman 1. Te mereces algo más, querida Gwyneth, cuando vuelvas a estar de bajón tú ponte en contacto con nosotros, que desde que nuestra increíble directora Lucía Tello se encargó del corto “Un tango con Norma”, podemos reconducir tu carrera y volver a hacerte pretendiente a otra estatuilla dorada. Créeme, que Lucía tiene talento, especialmente al escoger a sus actores…
Asumámoslo, nadie que no sea estadounidense podría lograr la paz mundial a golpe de hierro -no me refiero a fuera de las pantallas, of course-. Por supuesto, el mismo sujeto que consigue la paz mundial, es capaz de organizar espléndidas fiestas en mansiones de ensueño, con una simple llamada. Y por si fuera poco, en el período en el cualquiera de nosotros -pobretones mortales- sufriríamos una tremenda resaca, nuestro magnífico héroe consigue sintetizar una nueva sustancia… (Ponle un Highway to hell de fondo y todos lo pasamos por alto, mientras los pies nos bailan solos…).
Pero lo peor, al margen de esas incongruencias ya típicas en este tipo de películas, es la tendencia a seguir dinamitando la esperanza de los espectadores. Una simple esperanza que se basa en encontrar una historia distinta, algo que no se haya visto aún. Para los que no tengáis estas aspiraciones, os lo aseguro… ¡esta es vuestra película!
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