Creía que un drama era cuando llora un actor,
pero de verdad lo es cuando llora el público.
Frank Capra
Queridos amigos de Todo Es Cine:
Un placer volver a estar con todos vosotros. Hoy os voy a recordar a dos actores tristemente desaparecidos, Joan Fontaine y Peter O´Toole, y para recordarlos, nada mejor que hablar de dos películas que ellos protagonizaron, y que quizá marcaron un antes y un después en su vida interpretativa, se trata de Rebecca y Lawrence de Arabia.
Imagen de Rebecca © 1940. Selznic International Pictures. Distribuida en España por Manga Films. Todos los derechos reservados |
Rebecca (1940, Alfred Hitchcock), basada en la novela homónima de Daphne Du Maurier y protagonizada por Joan Fontaine y Laurence Olivier. La historia nos lleva a la vida de una joven apocada, discreta e insegura (Fontaine), a quien un aristócrata viudo, Maximilian De Winter (Laurence Olivier), pide matrimonio. La joven no era capaz de entender cómo alguien de esas características se había enamorado de ella. Después de la boda, se trasladan a Manderley, la mansión en la que pasará numerosos sucesos, no buenos precisamente. Es una película de las que hacen época, si ya la habéis visto, os gustará recordarla; para los que no la hayan visto todavía, os la recomiendo, Rebecca forma parte de un legado que debe seguir pasando de generación en generación.
Imagen de Lawrence de Arabia © 1962. Horizon Pictures. Distribuida en España por Columbia TriStar Home Entertainment. Todos los derechos reservados |
Lawrence de Arabia (1962, David Lean), protagonizada por Peter O´Toole, nos lleva a la vida de T. E. Lawrence (O´Toole), destacado en El Cairo durante la I Guerra Mundial y experto en la cultura árabe. Cuando éste muere en 1935, un periodista se interesará por su historia, indagando las aventuras que Lawrence vivió en sus misiones diplomáticas. Es otra de las películas que forman parte de la Historia del cine escrita con mayúsculas.
Tanto Peter O´Toole como Joan Fontaine, hermana de Olivia de Haviland (Melania en Lo que el viento se llevó), son unos intérpretes que no debemos dejar escapar de nuestra memoria, poseen una gran fureza interpretativa y han dejado un gran legado para todos nosotros.
Desde aquí, desde estas páginas, la máxima con la que empezamos: el drama no es cuando llora el actor, sino cuando llora el público, por eso desde aquí un gran aplauso, no porque el telón se haya bajado, sino porque Fontaine y O´Toole lo han hecho excepcionalmente bien.
Muchas gracias.
Desde la Mecedora, con cariño
Deja un comentario