Deudo y amistad se pierden con la falta de comunicación
Sta. Teresa de Jesús

Queridos amigos de Todo Es Cine:

Un placer volver a estar con todos vosotros. Empezamos nuevo mes y me gustaría hablaros de una película que, por lo menos, creo que os divertirá, se trata de Unidos por un sueño (2011, Sebastián Grobler). La trama nos lleva a 1874, a un colegio alemán con una forma férrea y dura de tratar a los niños y muchachos, muy digna de su época.

daniel bruhl en todo es cine
Imagen de Unidos por un sueño (2011), producida por Deutschfilm, Cuco Clock Entertainment, Senador Film Produktion, Rialto Film y ARD Degeto Film. Distribuida en España por Flins & Pinículas. Todos los derechos reservados

La historia es verídica, le sucedió al profesor Konrad Koch en la época imperial alemana. Dicho profesor (Daniel Brühl), llega al colegio como nuevo profesor de inglés, allí se encontró con una gran barrera de comunicación entre él y sus alumnos. Aunque el director y él querían darle al colegio un giro y abrir algunas puertas, se encontraban con grandes lastres del pasado. Las rencillas entre los dos países no ayudaban a esas clases de inglés, en las que los alumnos dejaban patente que no querían saber nada ni de Inglaterra ni de quien les llevaba su cultura. Pero el profesor Kock no se quedó ahí e ideó un experimento que a él también le había ayudado, el fútbol.

Imagen de Unidos por un sueño (2011), producida por Deutschfilm, Cuco Clock Entertainment, Senador Film Produktion, Rialto Film y ARD Degeto Film. Distribuida en España por Flins & Pinículas. Todos los derechos reservados

Les enseñó mediante las normas, las estrategias y los pases, cómo se denominaban los términos en el idioma originario, y poco a poco los alumnos se iban fascinando por poder ir al gimnasio con una pelota de piel a hacer un juego hasta entonces desconocido; pero lo más importante es que todos se hicieron una “piña”, todos eran equipo y como equipo se ayudaban y reconfortaban de todo lo que les pasaba; cada casa era un mundo y todos sufrían, desde el más pobre del colegio al más rico de todos, que era un pobre infeliz. Juntos aprendieron a ser fieles amigos y a entregarse por un ideal, por un sueño. Su revolucionario juego hizo que se llegara a prohibir el fútbol, aunque ahora estén en todas partes.

Me gustaría que, si tenéis la oportunidad y os interesa, veáis esta película, el protagonista, Daniel Brühl, interpreta con gran credibilidad la pasividad y el arrojo que requería su personaje, la paciencia de alguien que sabe y quiere cambiar las cosas. Deja que los chicos aprendieran jugando y, en el juego, aprendieron a vivir. La vida está llena de normas, llena de entusiasmo, pero todo junto ayuda a llevarlo a la cotidianeidad y a sentirte perteneciente a un grupo, acogido. Qué importante es esa palabra, el ser humano debe ser acogido, respetado, amado; en eso estriba nuestra supervivencia, nadie crece como las esporas, no somos plantas, somos humanos que necesitamos de otros seres humanos.

Ojalá no haga falta de comunicación, ni falta de oídos que escuchen a los demás. Todos formamos parte de un equipo, y este equipo, el de Todo Es Cine, os desea un feliz mes de julio.

Con todo el cariño, desde la Mecedora

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