Película: El médico alemán. AKA: Wakolda. Dirección y guion: Lucía Puenzo (basado en novela Wakolda de Puenzo) Países: Argentina, Francia, España y Noruega. Año: 2013. Duración: 93 min. Género: Drama. Reparto: Àlex Brendemühl (Mengele), Natalia Oreiro (Eva), Florencia Bado (Lilith), Diego Peretti (Enzo), Elena Roger (Nora), Alan Daicz (Tomás), Guillermo Pfening (Klaus). Producción: Lucía Puenzo. Música: Daniel Tarrab, Andrés Goldstein y Laura Zisman. Fotografía: Nicolás Puenzo. Montaje: Hugo Primero. Diseño de producción: Marcelo Chaves. Distribuidora: Wanda Visión. Estreno en Argentina: Agosto 2013. Estreno en España: 11 Octubre 2013.

La Patagonia, 1960. Una carretera infinita dentro de la ruta del desierto. La vista no alcanza a divisar más allá que rocas y polvo en cualquier punto cardinal. Un coche emprende su viaje hacia Bariloche, donde Eva (Natalia Oreiro) y Enzo (Diego Peretti) pretenden reabrir un antiguo hotel familiar. Con ellos viajan sus tres hijos, un adolescente, un niño de seis años y Lilith (Florencia Bado), una niña de doce. La pequeña Wakolda, muñeca de Lilith y desencadenante de la trama, cae al polvoriento suelo para encontrar en las manos de Helmut Gregor (Álex Brendemühl), un perverso destino. Él es un médico alemán, un genetista que ve en las bellas proporciones de Lilith la proximidad a la perfección, una perfección que se alcanzaría con mayor altura. Aunque aparentemente parezca centrado en la cría de ganado, Helmut se obsesionará con el caso de Lilith, mudándose al hotel de la familia para seguir de cerca el desarrollo de la pequeña y, colateralmente, la evolución del embarazo de Eva.

Misterioso, seductor, Helmut va ganándose a la familia otorgando a cada miembro lo que éste precisa: un médico de cabecera que controle la salud de sus hijos para Eva, un inversor que apoye los negocios para Enzo y un admirador para Lilith, siempre menospreciada por su corta estatura. Sometida a un tratamiento hormonal para aumentar su tamaño, ninguno de los miembros de la familia sabrá hasta qué punto los experimentos de Helmut Gregor son  perniciosos, máxime teniendo en cuenta que su verdadera identidad es la de Josef Mengele, el “ángel de la muerte” de los campos de concentración nazi, auténtico experimentador de los límites de la naturaleza humana en Auschwitz. Su oscuridad poco a poco se hará más patente, llegando a alcanzar cotas de auténtica violencia, cuando la vida de los hijos de Eva penda exclusivamente de la mano del médico alemán.

Imagen de “El médico alemán. Wakolda”, película distribuida en España por Wanda Visión © 2013 Historias Cinematográficas, Wanda Visión, Pyramide Productions, Hummel Film y Moviecity. Todos los derechos reservados.

Brillante película de Lucía Puenzo, la tenebrosidad de su trama queda compensada por unos recursos sorprendentes, una violencia contenida que perpetúa una tensión continua, y que desemboca en un final a contrarreloj dinámico y sostenido. La química que despliega Álex Brendemühl con todos los personajes de la cinta muestra un trabajo interpretativo soberbio, comedido, capaz de seducir dentro de su agresividad, con una tensión que sólo aflora cuando de sus labios emerge una amenaza más tarde cumplida.

La elegancia de la interpretación, el ímprobo esfuerzo de todo el reparto para aprender y hablar alemán con competencia, el profundo trabajo historiográfico que implica tanto la novela de Puenzo como la película que nos ocupa, y el espléndido elenco de la cinta, con Oreiro, Roger y Peretti a la cabeza, completan una película compleja, difícil pero espléndida. Por supuesto no podemos hablar de El médico alemán. Wakolda, sin hacer referencia a Florencia Bado, epicentro de la historia y auténtico eje, cuya interpretación excede la profesionalidad y cuyo tratamiento, verbigracia del talento de Lucía Puenzo, es tan respetuoso como limpio, sin incomodidades de despertares adolescentes que tanto malogran según qué tramas.

Un trabajo valiente de dirección, fotografía e interpretación que llegará a nuestras salas rodeado de los mejores laureles, y que en su recorrido por las salas puede desembocar en los Oscar. Altamente recomendable.