En un mar calmado todos somos capitanes
John Ray
Queridos amigos de Todos al cine:
Un placer volver a estar con todos vosotros, y tener el placer de compartir una película que a todos nos hizo vibrar. Me refiero a Titánic (1997, James Cameron). La historia trata de un muchacho, Jack (Leonardo DiCaprio), que gana junto con su amigo, y a última hora, los pasajes a Nueva York en el barco más famoso y poderoso de aquel momento, del que se decía que “ni Dios podía hundirlo”. En esa gran “ganancia”, se enrola en una aventura que será para toda su vida. Allí conoce por avatares de la vida a Rose (Kate Winslet), una chica de clase alta que va viajando con su novio y su madre; pero ella se fija en Jack y juntos tienen un apasionado idilio que marcará su existencia de Rose de por vida.
TITANIC. Twentieth Century Fox Film Corporation, Paramount Pictures, Lightstorm Entertainment. Distribuida en España por Hispano Foxfilm. Todos los derechos reservados
La historia es bonita, tiene dos partes, una bucólica, alegre, llena de espíritu con banda sonora celta y una maravillosa voz de Celine Dion que, como nadie, sabe ponerte en contacto con tu lado amable y romántico, para luego entrar en una segunda parte, la de la destrucción que todos conocemos a través de la historia, y es la de un terrible naufragio debido a un iceberg que no se avistó. Para los que ya conocéis la historia y habéis disfrutado de esta maravilla de producción, sabréis que han tenido en cuenta todos los detalles, incluyendo la vajilla, las copas, la música… Es una majestuosa y os hará disfrutar, y digo disfrutar pues casi todo el mundo repitió en el cine y fue un gran éxito de taquilla. Sus once estatuillas la avalan.
Y para quien no la haya visto, no voy a revelaros nada, pues el final tiene su aquel, y espero que cuando todos la volváis a ver ahora en 3D, disfrutéis con todos los sentidos de esta obra de arte en la que Kate Winslet y Leonardo DiCaprio bordan sus papeles, saben hacernos disfrutar, os enamorarán y jugarán con vosotros en un bonito y maravilloso baile que conseguirá erizaros la piel y pegaros a la butaca. Es maravilloso, me alegro de volver a verla en la taquilla, pues así todos ganamos, además esta película está hecha para ser vista en el cine, en la gran pantalla puedes distinguir mejor todos los matices, incluso oler el frío.
En este mes hace un siglo de la desaparición de ese indestructible titán, hasta su nombre lleva consigo la grandeza; pero hay que tener en cuenta que cuanta más grandeza, más cuidado se debe tener; la vida de todas esas personas que quedaron en el océano Atlántico debe ser recordada con todo el cariño, y el director James Cameron sabe tratar el tema con delicadeza y mesura, y ser un buen capitán.
Espero que disfrutéis, sabemos que es una catástrofe pero vivámoslo como un aprendizaje, y viendo el trabajo tan maravilloso de todos los que trabajaron para que podamos volver a disfrutar desde la butaca ese maravilloso viaje que Jack empezó en Southampton y que terminó aquel 14 de abril de 1912. Todos con buena mar somos buenos capitanes.
Con todo el cariño, desde la Mecedora.
Y un recuerdo muy especial a una chica especial y a su madre, María Beatriz y Margarita, que supieron sacar provecho de esta maravillosa película.
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