Título original: Fifty Shades Darker.
País: Estados Unidos.
Año: 2017.
Duración: 118 minutos.
Género: Drama.
Reparto: Dakota Johnson (Anastasia Steele), Jamie Dornan (Christian Grey), Rita Ora, Kim Basinger, Luke Grimes, Victor Rasuk, Max Martini, Eric Johnson, Bella Heathcote.
Guion: Niall Leonard; basado en la novela de E.L. James.
Música: Danny Elfman.
Distribuidora: Universal Pictures International Spain.
Estreno en España: 10 Febrero 2017.
Queridos amigos de Todo Es Cine:
Un placer volver a estar con todos vosotros. Hoy os voy a hablar de Cincuenta sombras más oscuras, secuela de la película que ya abordamos en su momento, Cincuenta sombras de Grey. La historia nos lleva de nuevo a la vida de Anastasia (Dakota Johnson), quien vive ya lejos de Christian Grey (Jamie Dornan), aunque siga enamorada. Le recuerda, sabe que le hace daño, pero sigue pensando en él. Ahora trabaja en una editorial y su jefe Jack Hyde (Eric Johnson), parece muy agradable. Un día se escapa del trabajo para acercarse a la exposición fotográfica de un amigo, donde descubre que seis de las obras son retratos suyos, también allí se entera de que un personaje anónimo acaba de comprar todas las imágenes. Ana ve cómo Grey reaparece en su vida, y deciden quedar para cenar. Ella pone sus condiciones, avisándole de que irán poco a poco y, ahora, sin ningún secreto.
Desde el principio Grey le hace su primer regalo, un móvil, al que llama de manera constante para pedir noticias. También le regala un ordenador, en el que todo el día tiene mensajes de su admirador. Pero eso es solo el principio, cada vez que Grey quiere algo, acaba teniéndolo; un velero que él lleva y le deja a ella para que se sienta la ‘capitana’, como ella bien pronuncia; una fiesta benéfica que la familia de Grey prepara. Incluso Christian decide llevar a Ana a la peluquería de su primera amante (Kim Basinger), y allí ve a otra de las chicas que Grey dejó en el camino, una joven con vendas en las muñecas y que sigue a Ana a donde ella vaya. Pero cada tropiezo, tendrá su recompensa. Dinero, vestidos, joyas… El resto es para vosotros.
Una de las lecturas que Cincuenta sombras más oscuras ha provocado en mí, ha sido la comparativa con el cine de otras épocas. Ver sobre todo cómo reaccionan las chicas, pues atrae mucho al público femenino, me hizo pensar en las películas que han dejado calado hondo en otras décadas. Empecemos por orden temporal. En 1986 se estrenó Dirty dancing. La historia de aquella joven que va a ir a la universidad y conoce a un bailarín a tiempo parcial, que necesita otro trabajo para vivir. La película acaba en un baile que todos conocemos, donde nadie arrincona a Baby. En 1990 Garry Marshall nos trajo Pretty Woman, la historia de una prostituta y un millonario que, intentando salvarla, es salvado por ella. En 1997 llegó Titanic, en la que una chica de primera clase se enamora del muchacho pobre que salva su vida y su futuro, quien deja espacio en una puerta flotando para que ella siga. La siguiente es la saga de vampiros Crepúsculo, de 2008 a 2012, en la que el chico tiene recursos económicos, y se enamora de una chica del instituto, aunque debe hacer esfuerzos, él y su familia, por no hacerle daño y convertirla en una de ellos.
Con Cincuenta sombras más oscuras no hace falta un barco, él ya se lo ha comprado; no hace falta un hotel como el de Dirty Dancing, Grey también lo compra; ni la ropa ni los viajes que en Pretty Woman él le ofrece, junto con el sueño de ser rescatada por un príncipe azul, antes de que ambos se rescaten mutuamente. Tampoco se trata de un chico blanco pálido, que la hace volar por las copas de los árboles, pues Grey es un hombre que se cultiva los músculos, moreno y saludable, y si quiere volar tiene un helicóptero. Vamos, que lo tiene “todo”. El cine sigue siendo el sociómetro de la realidad, nos guste o no. Por eso, como reza la máxima, quienes creen que el dinero lo hace todo, terminará haciendo todo por el dinero,
Con todo el cariño, desde la Mecedora.
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