Debe cultivarse en la infancia preferentemente los sentimientos de independencia y dignidad.

José Martí

Queridos amigos de Todo Es Cine:

Un placer volver a estar con todos vosotros. Empezamos mes y, con él, quiero proponeros hablar de una película francesa, Historias de una indecisa (2017) dirigida por Eric Lavaine.

Imagen de ‘Historias de una indecisa’ © 2017 Sombrero Films, Atelier de Production y Pathé. Distribuida en España por VerCine. Todos los derechos reservados.

La historia nos lleva cerca de París. Allí Juliette (Alexandra Lamy), está en los jardines de Versalles con su pareja, cuando una abeja que se posa de flor en flor, termina en el refresco que está ingiriendo el hombre, con su consabida picadura. Esto le lleva a tener una fuerte reacción alérgica, ante la cual Juliette no sabe qué hacer. La joven tiene un grave problema, no sabe o no puede tomar decisiones; se bloquea al tener que pensar en tomar alguna alternativa, cosa que, en ese momento, pudo haberle costado la vida a su pareja. Cuando salen del hospital, él la deja inmediatamente, pues ni después de lo ocurrido es capaz de decidir nada por sí sola.

Imagen de ‘Historias de una indecisa’ © 2017 Sombrero Films, Atelier de Production y Pathé. Distribuida en España por VerCine. Todos los derechos reservados.

Juliette se ha quedado sin madre, de quien parece haber heredado esa terrible dificultad de vida. Ante su soledad, se resguarda al amparo de sus amigas, Sonia (Sabrina Ouazani) y Joëlle (Anne Marivin), dos fabulosas amigas que quieren y protegen a Juliette. Se queda en casa de Joëlle por un tiempo, cuyo marido tiene un gato al cual está adiestrando, y con el que quiere triunfar en las redes sociales enseñándole a chocar mano y patita. Pronto su otra amiga, Sonia, crea para Juliette un perfil en una aplicación de contactos, a lo que ella accede.

Imagen de ‘Historias de una indecisa’ © 2017 Sombrero Films, Atelier de Production y Pathé. Distribuida en España por VerCine. Todos los derechos reservados.

Por avatares del destino, en su primera cita se equivoca de persona y acaba hablando con  Paul (Jamie Bamber), un escocés que le sigue el juego, pero quien no le confiesa que tiene novia y está prometido. Al cabo de los días conoce a Etienne (Arnaud Ducret), otro chico que, al igual que el padre de Juliette, Richard (Lionnel Astier), tiene un pequeño restaurante y es chef. En una fiesta, en la que Juliette acabó algo bebida, sus amigas le incitaron a tener que volver a ponerse en circulación, a lo que Juliette no solo accede, sino que reta al destino: ser irá con el primer hombre que coja un canapé de salmón. Así sucede y Juliette, fiel a su palabra, acaba en los brazos de Etienne totalmente desinhibida por el alcohol.

Imagen de ‘Historias de una indecisa’ © 2017 Sombrero Films, Atelier de Production y Pathé. Distribuida en España por VerCine. Todos los derechos reservados.

Pero su historia se vuelve más bizarra. Paul no la ha olvidado, se da cuenta de que su vida ha sido dirigida por su familia de generación en generación, y que tienen todo planeado para él. Por eso busca a Juliette. Pero ella, en su clave de no poder decidir, sigue con las dos relaciones hasta que ambos le piden matrimonio, coincidiendo ambas bodas en la misma fecha.

Imagen de ‘Historias de una indecisa’ © 2017 Sombrero Films, Atelier de Production y Pathé. Distribuida en España por VerCine. Todos los derechos reservados.

Es una comedia divertida de enredo, aunque lo que subyace a toda la historia es la absoluta indecisión, que convierte a Juliette en una persona desesperante que nunca sabe o no puede decir lo que piensa, siente o quiere. En la película, el que realmente le enseña a intentarlo es Paul, pues entiende mejor por lo que Juliette pasa, e intentando ayudarla se ayuda a sí mismo. La vida es compleja y, a veces, uno deja que sean otras personas quienes tomen decisiones pequeñas. Sin embargo, en ocasiones dejamos que los demás las tomen por nosotros cuando son realmente importantes. Por eso desde pequeños debemos permitir que los niños también tomen sus propias decisiones, que sepan entender lo relevante que es para su vida tener un criterio propio y un espíritu crítico, que les permitan argumentar y expresarse.

Así habrá futuros adultos que tengan claro lo que bien dice la máxima: debe cultivarse desde la infancia preferentemente los sentimientos de independencia y dignidad.

Con todo el cariño, feliz agosto para todos desde La Mecedora.

 

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